Con más de 500 años de historia, la Cachaça podría ser considerada el primer destilado de América. El origen de la Cachaça (pronunciado kha-shah-sah) puede seguirse a través de dos vertientes históricas que convergen en el mismo período, es decir, el comienzo de la colonización de Brasil por los portugueses.

Aunque no existen datos precisos sobre el sitio donde se destiló por primera vez la Cachaça, podemos afirmar que el aguardiente empezó a destilarse en un ingenio azucarero ubicado en la costa de Brasil, de manera intencional entre 1516 y 1532. Así, fue la primera bebida destilada que se elaboró en América antes de la aparición de otras bebidas espirituosas como el Pisco, el Tequila, el Bourbon y el Ron.

A pesar de las muchas historias pintorescas sobre lo que constituye la ''zona cero'' de la Cachaça en Brasil, hay dos versiones que intentan, de manera más lógica,mexplicar algunos de los hechos que precedieron a la destilación inicial de Cachaça.

La primera versión afirma que los portugueses (los primeros exploradores europeos que llegaron a las costas de Brasil), acostumbrados a beber ''bagaceira'' (un aguardiente destilado del bagazo de uvas) improvisaron un aguardiente derivado de la fermentación y destilación de subproductos del jugo de la caña de azúcar que producían los mismos efectos placenteros del aguardiente que disfrutaban en Portugal.

Otra versión nos dice que durante el proceso de hervir el jugo de la caña de azúcar o ''garapa'' en los ingenios azucareros para producir azúcar, se desarrolló una espuma en la superficie de la "garapa" hirviendo. Esa espuma se quitó, se sacó de la olla hirviendo y se colocó en los comederos del ganado. Con el tiempo, el líquido espumoso fermentó y se convirtió en un caldo que se denominó ''cagaça'', un líquido que parecía dar vigor al ganado de la finca que solía ir a los comederos para consumirlo. Al notar el efecto que tenía en los animales, los esclavos que trabajaban en la propiedad lo probaron y comenzaron a consumir el líquido ellos mismos. Como los portugueses ya estaban familiarizados con las técnicas de destilación mediante alambiques, comenzaron a destilar el mosto fermentado de la cagaça, y probablemente también la melaza, un subproducto de la producción de azúcar- además del mosto del jugo de la caña de azúcar en sí, dando origen a la Cachaça, el aguardiente de caña de azúcar de Brasil.

La Cachaça se destaca por transmitir la riqueza cultural y la diversidad de Brasil y por el hecho de que su producción está repartida entre miles de productores, de norte a sur, en casi todo Brasil. La diversidad de la nación brasileña se refleja en la variedad de sabores y aromas que la Cachaça de cada región proporciona a los consumidores. El uso de una inmensa variedad de tipos de madera propios de cada una de las regiones de Brasil en las barricas utilizadas para el añejamiento de la Cachaça, como Amburana, Jequitibá, Maní (corazón púrpura), Bálsamo, Lapacho, Freijó, Eucalipto, Castaño, entre otras variedades, además del Roble, engrandece y realza los sabores enormemente ricos y diferenciados de la Cachaça.